La aerolínea colombiana lanzó “Destino Oculto”, una estrategia de marketing experiencial que invita a los viajeros a comprar pasajes sin conocer su destino final. La propuesta se volvió viral en redes y consolidó a Wingo como referente de innovación en la industria aérea latinoamericana.

En un mercado aéreo donde la competencia por precio dejó de ser suficiente, Wingo decidió volar más alto con creatividad. La aerolínea low cost colombiana sorprendió con “Destino Oculto”, una campaña que transformó la compra de boletos en una experiencia lúdica, emocional y viral. La propuesta conquistó a miles de usuarios y se convirtió en uno de los fenómenos de marketing más comentados del año en la región.

La dinámica es tan simple como creativa: los pasajeros adquieren un boleto sin saber cuál será su destino hasta después de la compra. Solo reciben algunas pistas —si el destino es de playa, montaña o ciudad— y un rango de fechas sugeridas. Tras concretar la compra, se revela la ciudad elegida y los viajeros pueden acceder a premios sorpresa, como noches de hotel, millas adicionales o upgrades de cabina.

Este formato gamificado convirtió el proceso de compra en un juego digital interactivo, generando misterio, expectativa y una avalancha de viralización espontánea en redes sociales. Los viajeros comparten sus destinos, reacciones y videos, convirtiéndose en auténticos embajadores de marca.

Más allá del impacto viral, la campaña permitió a Wingo recopilar datos valiosos sobre las preferencias y hábitos de sus usuarios, fortaleciendo su estrategia de segmentación y fidelización. Todo ello con una acción de bajo costo y alto retorno, basada en marketing experiencial, emoción y contenido generado por usuarios (UGC). Justo lo que hoy esperamos, construir comunidad, marcando un precedente.

El fenómeno se suma a una tendencia global de innovación en el marketing aéreo. Iberia lanzó en 2024 el mayor concurso de su historia al sortear un avión completo para volar dentro de Europa, premiando a usuarios que adivinaban rutas misteriosas; Air New Zealand transformó sus videos de seguridad en verdaderas piezas virales de branding.